Vistas de página en total

martes, 13 de mayo de 2014

...y asi es como el pop, nos ayuda a superar las rupturas...

Anoche, leí un tuit de Bubu, sobre si debía dejar de luchar por amor.


Yo soy de los que opinan que por amor, hay que luchar siempre.

Claro, que yo no sé (en este caso) las circunstancias que han llevado al pobre Bubu a esa reflexión.

Supongamos que ha sido un desengaño amoroso.

Un desengaño amoroso, siempre tiene varias etapas, pero la primera es revolcarse un poco en el drama (y os informo desde ya que yo soy el rey del drama, mucho antes de que apareciera Paqui la Coles, eso es un hecho y no me escondo).

Ya sabéis que el drama y la homosexualidad van cogidas de la mano como la Pantoja y Maria del MonteEncarna Sánchez, pero una ruptura amorosa es igual de dolorosa camines por la acera que camines.

...así que en toda ruptura no puede faltar frases tipo '¡Que sola estoy!'.

Eso es un hecho.

Creo, sinceramente, que ya tenemos una edad en la que hemos perdido la cuenta (al menos yo) de las veces que nos han abandonado como a un perro sin pedigree en pleno agosto en el arcén de una carreterucha secundaria de El Ejido.

Y es en ese momento, en el que piensas que ya no habrá otra persona igual, que esa era la definitiva, que todo era distinto…

Pero no maricones, todo es una vil y cruel mentira.

Ni era todo distinto, ni era el definitivo...

Era todo una mentira, una parodia... un chiste.

Una ilusión.

...y después de esto, llega el momento para:

Llorar mientras lees vuestras conversaciones del whatsapp...

Ver sus fotos...

...y arrastrarte rogando una reconciliación que nunca llegará.

..y después de este momento de bajada de bragas y pérdida absoluta de la poca dignidad que nos queda, empezamos a querer superarlo.

Asi que llamas y te desahogas con tus amigas travestis y mariliendres más cercanas, empiezas a poder hablar sin derrumbarte y sin romper a llorar como Rosa Benito, y de repente... ¡ya no le quieres ver!.


Pero tu mente (aún nublada por su pollaboca), es incapaz de encontrar un rastro de objetividad entre tanto recuerdo y es cuando llega el momento en el que el pop nos salva la vida.

Es el momento para escuchar 'No' de Shakira.

No sólo por el mensaje (que también), sino porque entender la letra que canta esta mujer te mantendrá más distraído que cualquier peli porno.


Ahora viene cuando vuelves al punto de partida, que diría la Jurado.

Esta científicamente demostrado que, cuando empiezas a ver la luz al final del cuarto oscurotúnel, vuelves a recaer.

Es un hecho, yo no me invento nada.

Tú estabas tan a gusto, orgulloso de ti mismo por la madurez demostrada por haber aguantado 48 horas sin pensar en esa criatura que te ha roto el corazón y no el culo, cuando de repente, te sorprendes viendo cualquier película romántica del Divinity y estás llorando como una perra (again).

Momento idóneo para escuchar la canción menos digna jamás escrita para una ruptura sentimental:

Sin ti no soy nada.


Esta canción es una puta oda a la dependencia emocional, un dramatismo exagerado que sólo es capaz de aliviar un buen porro de marihuana.

Pero no te lo pierdas, que ahora viene lo mejor.

Después de la catástrofe de tu autoestima, llega la rabia, ¡LA IRA!

Sigues estando triste, pero ahora además estás enfadado.

Sabes que es injusto, qué digo injusto, ¡es incomprensible que no te quieran! ¡A TI! (yo esto me lo digo todas las mañanas cuando amanezco violandoabrazado a mi almohada.

Es el momento de volver a abrirte el perfil de Bender, Grindr, Badoo, o Foursquare (que nunca se sabe en que esquina se encuentra el amor de tu vida) y empezar a zorrear.

Es el momento de criticarle, se lo merezca o no.

Es el momento de creerte mejor que él (bueno, que él y que cualquiera).

Es el momento de escuchar...'Mi mundo sin ti'.


No importa que la letra no tenga nada que ver con tu relación o que tú en vez de al cuerno, quisieras mandarlo a la mierda.

Lo que importa es la esencia.

Cantar esta canción delante del espejo del baño al salir de la ducha es absolutamente IMPRESCINDIBLE para terminar de salir de la depresión intensa.

Ésta es la indicada.

La criatura que te ha quitado a tu hombre es una zorra mala y él, un comepingas.

Y has de abanderarte el discurso de que 'acabará volviendo y para entonces le diré ¡NO!'.

Aunque lo mejor es que no te engañes, honey:
Ni él va a volver, ni tú sabrías decir que no (o al menos, yo no podría, porque tengo cadencias emocionales bien fuertes y yo, con poco cariño me apaño).

Luego, claro está, es el momento en el que te pille la ruptura, porque si te pilla a la edad mental de una adolescente, tu drama y tu dolor durará aproximadamente el triple que el de una persona normal.

Pero para ese momento, lo mejor es escuchar esto, (pero acéptalo, te va un drama más que a ninguna otra persona).



Lo tuyo ya es llorar por llorar, Mari Encarni.

Esto es lo que yo denomino sufrimiento gratuito de los noventa.

Si ya resulta que eres mas maduro y eres de los que dan el pego como hombre y heterosexual, y estás en ese momento de 'ya lo he superado, me voy a las calles a que me den lo mio', también puedes escuchar esto, que también te ayudará a levantar cabeza y a hincar rodilla.

                                             

...y si la ruptura te pilla en la etapa travesti (que toda persona tiene) lo suyo es que esta canción sea tu nuevo himno:


...bueno, realmente, esta canción da igual si te pilla siendo travesti o muy muy marica, porque esta canción puedes usarla para tus shows en la bañera o para patearte tu pueblo con tus cascos, tus tacones, pisando fuerte e imaginando que estas en un videoclip.

Porque recuerda:

¡Toda tu vida es un videoclip!

Al final, cuando ya has pasado todo tu drama personal y te das cuenta de que has sobrevivido y que de todo se aprende y que hay más pollashombres en el mundo, llega el momento de florecer.

Llega el momento de volver a quererte, de volver a amarte y a pintarte y ponerte la peluca, vestirte bien guapo y salir a disfrutar de la vida.

Y para eso, amiga, sólo hay una canción posible.


Basta de llantos, basta de autocompadecerse.

No pierdas ni un minuto más de tu tiempo en lamentarte por una persona que, como ya sabes, no valía la pena.

Y después de todo esto, lo único que uno ya no quiere, es volver a ser 'ése', el que lo pasa mal.

No queremos ser 'la víctima' de ningún mierdaseca.



...también podemos optar por convertirnos en los verdugos.

Para lo cual, no hay mejor canción para cerrar esta reflexión mía (y este proceso vital que todos pasamos al menos una vez cada fin de semana) que esta canción, que es lo mas.


Sed felices y haced caso a la Veneno, que es más lista que el hambre, y que de amor sabe mucho.

*NOTA MENTAL:

Cuidado con identificar el amor, las relaciones y a las personas con las canciones, que vosotros sois capaces de follaros un cd, que el pop nos salva la vida, pero también nos vuelve gilipollas.